Es una de las distribuidoras con mayor incumplimiento en el pago de la electricidad que se compra en el mercado mayorista.

Según datos del gobierno nacional, la deuda de la distribuidora de electricidad rionegrina Edersa por la compra de energía es una de las más altas del país: más de 2.000 millones de pesos.

El incumplimiento no es novedad: la provincia acusa a la empresa del Grupo Neuss de financiarse con la plata que recauda y no transfiere. La respuesta es un reclamo de una mejora tarifaria que el ente regulador desoye desde hace años.

Los datos fueron dados a conocer por el diario La Nación, de Buenos Aires. En el listado se incluye a las dos distribuidoras neuquinas que compran en el mercado mayorista, la cooperativa CALF y la estatal EPEN, pero ambas empresas negaron incumplimientos.

Cammesa es una compañía mixta bajo el control del gobierno nacional que administra el mercado de la generación y el transporte de electricidad en el país. Recauda de los distribuidores y paga a las empresas que producen y a las que administran líneas de alta tensión y estaciones transformadoras.

El precio mayorista está desregulado. Y además hace años que una parte no se traslada a los usuarios sino que se cubre con subsidios. Lo que ocurrió desde la asunción de Mauricio Macri es que esos precios desregulados pasaron de 600 y 2.300 pesos en megavatio hora (MWh) y el traslado, que era de unos 150 pesos en 2015, hoy es de 1.160 pesos por MWh.

A poco de asumir, Mauricio Macri decidió condonar las deudas que tenían las distribuidoras con el sistema, aunque nunca se dieron los detalles.

Hoy la tasa que cobra Cammesa a los que refinancian la deuda es de otros mercados: se habla de un 8% anual en un mercado con tasas de referencia del Banco Central de 50% e inflaciones mayoristas de un porcentaje similar.

La tasa que se cobra por esta deuda “nueva” no trascendió, en parte porque los acuerdos son insólitamente privados.

Edersa no quiso hablar del asunto, en una política que mantiene desde hace tiempo.

Cammesa, a pesar del tamaño de la deuda, ha hecho responsable al gobierno de Alberto Weretilneck por los incumplimientos. Y acaba de contratar a una consultora para demostrar el atraso en la tarifa de Edersa.

CALF, que presta el servicio en la capital neuquina, aparece en el listado con una deuda de 140,7 millones de pesos. El monto es similar a lo que paga mensualmente por la compra de energía. Su titular, Carlos Ciapponi, viene manteniendo diferencias públicas con Nación por el precio de la generación y ratificó que no trasladará el último aumento a las facturas.

Desde CALF aseguraron que están al día con Cammesa, pero reconocieron que en caso de no pagar el incremento aprobado por Nación, tal como anticiparon, pueda generarse una deuda. Ante esto recordaron que otras distribuidoras, principalmente las de Buenos Aires, refinanciaron millonarias deudas a tasas muy por debajo de las de mercado. Por eso no descartaron solicitar un idéntico tratamiento.

Desde el EPEN reconocieron una deuda de alrededor de 140 millones de pesos, el equivalente a un mes de compra de energía, pero aseguraron que negocian porque Nación tiene deudas con el organismo provincial, originadas por obras que debía realizar y terminó cubriendo la distribuidora provincial.

“Está en marcha una negociación para resolver la diferencia entre lo que debemos y lo que nos deben”, aseguró una fuente del EPEN. Los saldos a favor se generaron por atrasos en el plan de Convergencia, surgido durante el kirchnerismo, y otros trabajos de infraestructura de la actual gestión que no fueron cancelados.

CALF se rebela y no desdobla su factura

El presidente de la cooperativa eléctrica CALF, Carlos Ciapponi, confirmó que no desdoblarán la facturación como lo exige el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social para los costos extras en las boletas del servicio. El organismo nacional, que regula las cooperativas, envió una intimación a todas las entidades.

Ciapponi ratificó que la facturación está ajustada al contrato de concesión vigente y que solo se modificará por una intervención del poder concedente que en la capital neuquina, es el municipio. Además insistió en que “el problema principal es el precio de la energía, que aumentó un 2.500% desde 2016 a la fecha”.

En declaraciones radiales el titular de CALF destacó que “el gobierno nacional salió a hablar de esto porque nosotros planteamos otra cosa. No se explica cómo se compone el precio de la energía en el país. Incluso el último cálculo (realizado por Cammesa) está totalmente desfasado”.

El presidente Mauricio Macri había acusado a las cooperativas y municipios de “esconder” sobrecostos en la facturas de energía.

En proporción

8% es la tasa de interés que pagan las distribuidoras por la refinanciación de la deuda anterior a 2016.

43% menos vale la electricidad para un hogar atendido por Edersa en relación con el EPEN.

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