Acostumbrados a leer innovaciones concernientes a la sustentabilidad desarrolladas en el exterior, era hora de presentar una local. La introducción le corresponde a un dispositivo eléctrico y electrónico llamado CILICON ( Controlador Inteligente de Línea y Consumo ), desarrollado íntegramente por los ingenieros argentinos Gastón Ainchil y Agustín Reibel, recibidos en el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA).
En un mundo con escasez energética y en donde además la producción de energía es a veces contaminante debido al uso de gas y carbón, el concepto del mismo consiste en educar al usuario final a consumir energía dentro del hogar de manera racional.
Todos solemos consumir en nuestros hogares más energía de la necesaria, ya sea consciente o inconscientemente, lo que termina repercutiendo en el medio ambiente.
Dicho esto, al colocar este dispositivo dentro de la red eléctrica de los particulares, el mismo regula los Watts que podemos consumir, si nos pasamos del permitido un sistema automático interrumpe la provisión de energía por un tiempo determinado, que puede ir de 1 a 10 minutos, restableciéndola luego de terminado dicho período e iniciando nuevamente la medición. Es decir que si en ese intervalo ningún equipo fue apagado el sistema vuelve a cortar la provisión de energía automáticamente. De esta manera uno finalmente termina encendiendo únicamente los equipos que necesita usar en el momento, y muy probablemente en el largo plazo adopte esta forma de actuar de manera sistemática.
Esto aplicado a gran escala reduce el consumo energético de manera masiva, por ende también su producción, lo que en definitiva se traslada en un beneficio para reducir la contaminación ambiental y el uso de recursos no renovables.
Adicionalmente, el CILICON viene con un sistema que protege al hogar por falla en la tensión entregada. Hubo casos en donde las distribuidoras eléctricas enviaron por la red picos de tensión que terminan arruinando equipos eléctricos dentro del hogar.
De esta manera, el dispositivo ante el envío de uno de estos picos interrumpe el suministro de energía de manera de proteger los artefactos y motores dentro del hogar, restableciéndolo nuevamente solo cuando la tensión haya vuelto a estar dentro de los parámetros normales establecidos. Esto beneficia tanto al usuario que deja de correr el riesgo de que sus aparatos eléctricos se arruinen, como a la distribuidora eléctrica que se evita litigios de dichos usuarios.
CILICON está siendo actualmente instalado por las distribuidoras eléctricas en aquellos hogares en donde la energía consumida no es pagada debido a la escasez de recursos de los propietarios. El problema que tenían las distribuidoras es que al estar entregando energía sin cargo, estos usuarios no valoraban el servicio y por ende no hacían ningún tipo de racionalización en su uso, llegando inclusive a usar la energía para trabajos rentados de alto requerimiento eléctrico.
Hay un doble beneficio en este punto, por un lado las eléctricas evitan los excesos de consumo de este tipo de usuarios, y por el otro a cambio de instalarles este dispositivo les ofrecen una factura de valor fijo y simbólico que hace valorar el servicio prestado.
Esto acarrea un enorme beneficio para estos usuarios ya que la factura termina actuando como un mecanismo de inclusión social, debido a que las personas que reciben esas facturas acceden a tener una factura vigente a su nombre con su domicilio. Esto que puede parecer una simpleza, para la gente de bajos recursos es sumamente importante ya que los pone al alcance de muchos productos y servicios del mercado en donde una factura vigente a domicilio es requerida.
Fuente: www.lanacion.com