Las Perlas sufre cotidianamente las dificultades de no ser estrictamente ni un barrio, ni una localidad: de estar a más de 20 kilómetros de Cipolletti, y a sólo ocho de Neuquén.

El gobernador Alberto Weretilneck confirmó que se logró un acuerdo con la cooperativa neuquina CALF y que no se cortará el servicio eléctrico.

«La que va a asumir la distribución es la provincia, después veremos de qué manera se lleva a cabo, es un tema que todavía falta analizar», tranquilizó Weretilneck.

Pero, más allá de este acuerdo puntual y del que hay demasiadas pocas precisiones, Las Perlas sufre cotidianamente las dificultades de no ser estrictamente ni un barrio, ni una localidad: de estar a más de 20 kilómetros de Cipolletti, la ciudad rionegrina de referencia, y a sólo ocho de Neuquén, que es parte de otra provincia, pero en la que la mayoría de los pobladores tiene su domicilio por cercanía.

Los que fijaron residencia legal en Las Perlas tienen que votar en Cerro Policía (Río Negro), a 110 kilómetros y, no figuran en el padrón municipal de Cipolletti por lo que no pueden elegir intendente.

Neuquén, por una cuestión de jurisdicción, no tiene injerencia en el sector. Sin embargo, la mayoría votan en la provincia vecina y en épocas electorales reciben «la visita» de los políticos en campaña, situación más de una vez cuestionada por la misma gente.

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