EL PLAN DE LOS ARQUITECTOS PARA EL FUTURO DE LA CIUDAD

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Presentarán el proyecto, que cuenta con tres ejes fundamentales enfocados en los vecinos, a Gaido en los próximos días.

El Colegio de Arquitectos de Neuquén (CAN) le presentará al intendente Mariano Gaido un proyecto con tres ejes fundamentales para planificar el crecimiento urbano en el mediano y largo plazo. Desde la entidad consideran que la participación de las sociedades intermedias y los vecinos es fundamental para lograr una versión superadora de la ciudad.

Esto se da en el marco de un profundo cambio en los desarrollos inmobiliarios locales, que pasaron de centrarse en la construcción de casas a priorizar los edificios. “Años atrás, sólo el 30 por ciento de las construcciones eran edificios, ahora esa proporción se revirtió y representan el 70 por ciento”, precisó el presidente del CAN, Diego López de Murillas. Resaltó que son buenas opciones para contener la creciente demanda habitacional y contó que hay muy buenos ejemplos locales, tanto públicos como privados.

Destacó la actitud del jefe comunal, quien los convocó para tener una opinión técnica respecto del camino que tienen que tomar las políticas municipales de urbanización para lograr una ciudad más ordenada y amigable con los vecinos, y contó a LM Neuquén cuáles son los tres ejes que propone la entidad que agrupa a los arquitectos para alcanzar este objetivo.

Señaló que el primer punto sugerido es planificar en conjunto con los municipios vecinos.

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“Es imposible imaginar el crecimiento de Neuquén sin tener en cuenta a Plottier, Centenario y Cipolletti, entre otras localidades”, manifestó.

Agregó que este trabajo fortalecerá el crecimiento regional. “Tenemos que pensar en el concepto de metrópolis. Somos catorce ciudades acá y cada una tiene su basurero, su parque industrial, sus tomas de agua. El pensamiento y la planificación en conjunto nos va a hacer más fuertes y va a darnos más posibilidades”, detalló.

El segundo eje se centra en un trabajo multidisciplinario, entre políticos, sociedades intermedias, profesionales y vecinos para repensar el plan urbano ambiental en el mediano y largo plazo. “Tenemos que definir qué ciudad queremos tener. Yo quiero una ciudad donde estén los chacareros, los petroleros, los industriales, los proveedores de servicios y los funcionarios, entre otras cosas. Hay muchos lugares intersticios que pueden traccionar la ciudad hacia ese destino deseado”, sostuvo.

Aseguró que es un proceso que lleva mucho tiempo y revisión, por lo que consideró que debe estar sujeto a una permanente observación y actualización. Subrayó que en este punto es necesaria la participación de los contribuyentes, ya que señaló que las ciudades “se construyen a partir de las necesidades de las personas”.

El último punto es modificar las cosas que se pueden cambiar inmediatamente. “Se puede hacer una actualización del Código de Edificación, definir sobre qué puntos puede haber flexibilidad y sobre cuáles no. Incorporar nuevas miradas, que, por ejemplo, apunten a hacer más eficiente el uso de la energía en la construcción. Mejorar la red de infraestructura, como el cableado eléctrico”, puntualizó.

López de Murillas agradeció la convocatoria del Municipio y manifestó su entusiasmo por cooperar en la planificación urbana de la ciudad. “Todo se comienza con pequeños pasos y desde el Colegio de Arquitectos creemos que este es el primero de muchos”, concluyó.

Quieren terminar con los paradigmas culturales

López de Murillas sostuvo que hay que derribar paradigmas culturales para lograr una planificación sustentable y un correcto aprovechamiento del espacio público. Indicó que se debe cambiar la concepción de “construir casas una al lado de la otra” y que “la ciudad se tiene que construir para las personas, no para los vehículos”.

Señaló que las tradicionales construcciones horizontales se convirtieron en un problema. “Tenemos que dejar de repetir esta cosa de los loteos y las casitas una al lado de la otra. Esto genera una ciudad muy costosa de mantener y de comunicar, entre otras cosas”, detalló.

Otro de los factores que juega en contra de la planificación sustentable es el uso del vehículo particular. López de Murillas explicó que con estos conceptos se tiende a generar avenidas con varios carriles y grandes obras viales con el objetivo de circular más rápido, pero subrayó que suelen traerles problemas a los vecinos.

“El corredor Doctor Ramón-Leloir es es muy difícil de cruzar, es jugarse la vida. Imagínese un señor o una señora mayor que fue a comprar al supermercado y tiene que cruzar con las bolsas”, sostuvo.

La solución a este problema, según López de Murillas, es la ampliación y el mejoramiento del servicio de transporte público. “Por ejemplo, en Buenos Aires tienen colectivos, tren y subte”, graficó.

En este sentido, propuso que se establezcan restricciones a los autos en algunos sectores de la ciudad, algo que ya se hizo en varios puntos de Europa con éxito.

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