El Ministro de Hacienda define qué pasará con las tarifas. Nicolás Dujovne reconoce que la suba de tarifas tuvo y tendrá impacto en la población, “Lo que nos queda es menos traumático”, dice. Pero reconoce que el Gobierno piensa en un sendero de aumentos para la energía eléctrica. Y en ajustes en los boletos del transporte, aunque allí buscarán reducir el impacto por el alto costo social de esa medida.

¿En qué medida los aumentos tarifarios estipulados para principio de año impactarán en la inflación?

Lo que nos queda por delante es mucho menos traumático de lo que sucedió en 2016. Ahora ya se hicieron todas las audiencias que estipularon los marcos regulatorios y la Corte Suprema. El único sendero de precios definido es el gas. Falta definir el aumento en transporte y distribución de gas y luz. Ese sendero se definirá en los próximos días. Es una labor conjunta entre Hacienda, Energía y Jefatura de Gabinete.

¿Dónde se sentirá más el impacto?

Donde hay muchísima incidencia es en los aumentos en transporte por la impacto en los sectores de más bajos recursos. Estamos enfocados en cuidar muchísimo en cuidar el sendero allí para que sea lo más gradual posible. El año pasado fue doloroso para las familias argentinas, pero al mismo tiempo todo lo que se hizo en términos de recomposición tarifarias de los servicios públicos se hizo para sentar las bases y que la economía empiece a crecer.

El año arranca con una suba de nafta en los próximos días, ¿no es como arrancar con el viento de frente?

Tenemos objetivos en conflicto: bajar la inflación, cuidar el bolsillo de las personas y bajar los subsidios. En ese delicado equilibrio, las naftas el año pasado subieron muchísimo menos que la inflación y la depreciación del tipo de cambio. Hay un desfase que se está corrigiendo. Es un ajuste necesario.

¿Las correcciones de precios deben ser a principio de año para hacerlas lo más lejos de las elecciones o, por el contrario, de manera gradual?

Las correcciones serán repartidas a lo largo de 2017. Además, en algunos casos ya está determinado por el propio marco regulatorio de los sectores, como por ejemplo, el de la luz y el gas. En ambos casos habrá ajustes tanto en el primero como en el segundo semestre. No enfrentar el problema no es la mejor alternativa. Entonces lo que tenemos que hacer es corregir los precios de los servicios públicos, gradualmente y cuidando a los que menos tienen. Ahora, este gobierno, a diferencia de anteriores, sigue un programa que tiende a normalizar la economía argentina aún en un año electoral.

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