Tres experiencias de planificación, valor económico, social y ambiental en la conferencia organizada por “Río Negro”.

“Cómo podemos producir un cambio para garantizar calidad de vida para nuestra generación, pero sin comprometer a generaciones futuras”.

Bajo esa consigna, planteada por la presidenta del directorio de Editorial Río Negro, Nidia Povedano, se realizó ayer en Neuquén la conferencia sobre desarrollo y sustentabilidad “Yo Protejo, el medioambiente”.

En concordancia con su misión de forjar mejores ciudadanos, “Río Negro” lleva adelante varias campañas de bien público y en este caso el objetivo fue concientizar sobre el cuidado del medioambiente y el uso racional de la energía.

La invitación a la reflexión llegó de la mano de tres exposiciones, en el auditorio del Museo Nacional de Bellas Artes. Los disertantes fueron Cristian Pérez, director de Asuntos Públicos y Comunicaciones para Coca-Cola Argentina; Agustina Zenarruza, líder en Responsabilidad Social Empresaria de Pan American Energy; y Carlos Ciapponi, presidente de la Cooperativa CALF. El panel fue moderado por el periodista Hugo Alonso.

En la apertura, la presidenta del directorio de “Río Negro” planteó la necesidad de diseñar estrategias conjuntas de planificación del desarrollo, además de resaltar la debilidad de los controles de organismos públicos en casos sensibles, como el cuidado del agua.

Pérez, un joven de Catriel que es licenciado en Turismo, trabajó en Neuquén y luego se incorporó a Coca-Cola, explicó la importancia que tienen las economías regionales para la compañía, que compra por año en Argentina u$s 250 millones en jugos concentrados.

“Compramos 42.000 toneladas de jugo (546.000 toneladas de fruta). El 80 por ciento de ese jugo se exporta. Argentina es el principal proveedor de jugo de fruta para Coca-Cola a nivel mundial. Tenemos un impacto muy grande, tenemos una responsabilidad muy grande”, resumió.

“La sustentabilidad está en el corazón de nuestro negocio. Tiene que ver con la posibilidad de crear valor económico y también valor social. Nunca vamos a poder ser exitosos como compañía si a la sociedad no le va bien. Pero también debemos tener valor ambiental. El agua es uno de nuestros principales insumos y si no la cuidamos vamos a perjudicar nuestro propio negocio”, agregó Pérez.

Por su parte, Zenarruza describió un proyecto que desarrollaron en el barrio Nueva España de Centenario, luego de las inundaciones del 2014, en el que contribuyeron para la conformación de una cooperativa.

“Queríamos promover una mirada de sustentabilidad, generar un recurso que quedara para el barrio y que no sea transitorio. Nosotros entendemos como sustentabilidad el apoyo al desarrollo con eje en la promoción de las capacidades locales”, puntualizó.

Finalmente, Ciapponi hizo hincapié en la importancia de incorporar cada vez más vecinos de los asentamientos irregulares a la red formal de energía eléctrica en Neuquén.

“No vimos desde que estamos en CALF una verdadera coordinación y alineación entre todos los niveles de gobierno para resolver la titularidad de la tierra, darle la posibilidad a los vecinos para que puedan acceder a los servicios esenciales. Por eso desde CALF decidimos poner el tema en la agenda pública, a través de nuestro programa de inclusión al servicio eléctrico”, sostuvo.

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