¿Retraso tarifario? Las multas del ENRE y los déficit acumulados, un coctel altamente explosivo. Edenor y Edesur, las dos principales distribuidoras de electricidad del país, que abastecen a la ciudad de Buenos Aires y al conurbano bonaerense, están con sus cuentas en rojo y muy complicadas financieramente, debido a la falta de una reestructuración en las tarifas y a los mayores costos que enfrentan. A esta compleja situación se le debe adicionar las fuertes multas que les aplicó el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) y bonificaciones a los usuarios por deficiencias durante el verano pasado en la prestación del servicio.
Según la información enviada por las empresas a la Comisión Nacional de Valores (CNV), Edenor perdió desde enero a septiembre de este año 1.443 millones de pesos. El rojo se incrementó un 82 por ciento con respecto de los 793 millones de pesos con los que cerró el mismo periodo de 2013.
Además, la distribuidora viene acumulando ejercicios negativos, como los de 2012 y 2011, y tanto su nivel de liquidez como su capital de trabajo están severamente afectados, incluso en el ejercicio 2013.
Esta situación deriva fundamentalmente del constante aumento de sus costos de operación necesarios para mantener el nivel de servicio y a la demora de la obtención de incrementos tarifarios o reconocimientos de sus reales mayores costos. El déficit que viene acumulando a lo largo de este año ha generado a su vez un déficit de patrimonio, por lo que de persistir esta situación a fin del presente ejercicio, la empresa se encontrará comprendida legalmente enmarcada para su disolución por pérdida del capital social.
En este complicado contexto la empresa mantiene permanentemente un déficit de capital de trabajo, dado que no cuenta con condiciones para acceder a otras fuentes de financiación con lo que se vio obligada a cancelar, solo parcialmente sus obligaciones con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) por la compra de energía o acumular otras deudas con fines específicos.
Para las empresas el deterioro es el resultado
de la política de subsidios
Por su parte, Edesur, no sé quedó atrás a la hora de anunciar resultados adversos. Sus estados contables cerraron al 30 de septiembre pasado para ese periodo de nueve meses con una pérdida de 2.019 millones de pesos. El resultado contrasta con el de 2013, cuando obtuvo en el mismo periodo una ganancia integral total neta de $ 1.123,7 millones.
La empresa advirtió que el resultado pone en evidencia que el margen de distribución percibido por la compañía es insuficiente para garantizar la sostenibilidad económico-financiero del negocio.
Al cierre de sus libros, Edesur presenta un patrimonio neto negativo de $245,5 millones, como consecuencia del contexto a
dverso en el que viene desarrollando su negocio desde la declaración, en 2002, de la emergencia económica y las políticas implementadas por el gobierno nacional desde entonces.
En cuanto al nivel de servicio, Edenor destacó que las infraestructuras de distribución de la energía han sufrido significativos deterioros a raíz de un nivel de inversiones insuficientes para sostener el crecimiento de la demanda y el natural deterioro físico de la red.
Para la empresa, este proceso de deterioro es resultado directo de ingresos muy inferiores a los de cualquier actividad de la misma naturaleza que opere fuera de la ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense. Debido a la gravedad de la situación, Edesur realizó presentaciones ante el ENRE para que en forma urgente se le permita reconocer en las tarifas las variaciones de costos del servicio que presta.
Además solicitó a los funcionarios nacionales del ministerio de Planificación que atiendan la situación de aumento de la demanda y de costos de distribución, el retraso tarifario y los efectos de todo ello. El ministerio que conduce Julio De Vido anunció en agosto de 2012 que se analizaban las medidas a adoptar en el sector eléctrico, con el fin de dar solución a los retrasos tarifarios y asegurar la rentabilidad dispuesta por la regulación.
Fuente: Alfredo Vigil – Suplemento Encomia y Petroleo – Diario La Mañana Neuquén